La Secretaría de Salud (SESA) informa que el dengue es un padecimiento febril agudo producido por un virus y transmitido al humano mediante la picadura del mosquito Aedes aegypti, el cual afecta a personas de cualquier edad. Por ello, en el estado de Querétaro se efectúan de forma permanente acciones de vigilancia epidemiológica.
Ante un caso probable de dengue se inicia con el protocolo para dar seguimiento epidemiológico y realizar la búsqueda intencionada de casos; al mismo tiempo, las brigadas de vectores realizan recorridos casa por casa para vigilar que no haya criaderos de moscos y efectúan acciones para eliminar al agente transmisor, por lo que se pide a la población permitir el acceso al personal, el cual asiste con identificación y uniforme para trabajar en las áreas en las que se localiza riesgo.
Con información al 14 de junio de 2024 se han registrado 13 casos positivos en el estado de Querétaro. Se trata de seis mujeres y siete hombres, del grupo de edad de 14 a 62 años, 12 con domicilio en el municipio de Arroyo Seco y uno en San Juan del Río. A nivel nacional al 10 de junio se han reportado 15 mil 742 casos positivos de dengue.
En el período de enero a mayo de 2024, las acciones de control de esta enfermedad que realizaron las y los trabajadores de las brigadas de vectores consistieron en descacharrización en 41 localidades, teniendo un concentrado de 20.25 toneladas de cacharros.
De la misma forma, se ejecutaron acciones de control larvario colocando abate en 23 mil 784 casas y 62 mil 263 depósitos, protegiendo a 68 mil 35 habitantes; se efectuó rociado intradomiciliario a cinco mil 59 casas, protegiendo a 30 mil 400 habitantes; se realizó fumigación espacial en cuatro mil 448 hectáreas; se colocaron 13 mil 74 ovitrampas en localidades de riesgo, con recolección de 32 mil 138 huevecillos.
La estrategia primordial para prevenir es el control de los mosquitos, porque así no hay forma de que se transmita el virus y por lo tanto no puede haber enfermedad. Para eliminar los criaderos de mosco de las viviendas se debe:
Evitar que los depósitos de agua sirvan de criadero de mosquitos, como las llantas a la intemperie, cubetas, c h a r c o s, recipientes de diferente tamaño, entre otros.
Lavar cubetas, piletas, tinacos, cisternas, floreros, bebederos de animales y cualquier recipiente que pueda servir para que se acumule agua de forma frecuente.
Tapar los recipientes donde se almacene agua.
Voltear cubetas, tambos, tinas, macetas o cualquier objeto que no se utilice y en el que se pueda acumular agua.
Tirar botellas, llantas, latas o trastes que ya no se utilizan y en los que se puede acumular agua.
Cambiar el agua de los floreros y bebederos de animales de compañía de forma frecuente.
Eliminar del techo, garaje, patio y jardín, todos los recipientes que sirvan al mosquito para desarrollarse.
Se sugiere no dormir a la intemperie y permanecer dentro de las viviendas al anochecer y al amanecer; utilizar ropa de manga y pantalones largos (de colores claros), utilizar telas mosquiteras en ventanas, puertas y pabellones para las camas; se obtiene mayor protección si están impregnadas de insecticida.
Asimismo, se recomienda a la población que, en caso de presentar síntomas sugestivos al padecimiento, como la fiebre elevada, dolor de cabeza, articulaciones, músculos, detrás de los ojos, aparición de ronchas o salpullido (puntos rojos) y malestar general, no se automedique y acuda de inmediato al Centro de Salud.
Informa la Secretaría de Salud Federal que, hasta el momento, ninguna vacuna cuenta con la eficacia necesaria para aplicarse como método de prevención masiva, es decir, no existe vacuna que pueda utilizarse en el Programa de Vacunación Universal.
Se exhorta a la población a que, de manera permanente, revise patios y azoteas, eliminando o controlando los posibles criaderos, disponiendo en la basura de aquellos que no tienen una utilidad en casa, o tapando, volteando y protegiendo el agua de los que si son empleados (estrategia Lava, Tapa, Voltea y Tira).